Pocas veces una banda ha tenido un nombre tan acorde con su música. Realmente es fácil asociar las lentitudes calmas y profundas que genera la aplicacion de morfina, con las lentitudes calmas y profundas de los saxofones dobles, los bajos estirados y los baterías casi jazzeras del trío Morphine. Más aún en el caso de un disco que evoca deliberadamente las lentas profundidades subacuáticas de la natación...
Esta es, sin duda, una banda fuera de lo común. No nos detendremos en su originalidad, que es quizás su mayor mérito. No el único; aquí hay también talento musical. No siempre talento compositor; ése no falta, pero tampoco abunda. En los discos de Morphine hay por los menos, casi siempre, unos cuatro temas de puro relleno. Este disco -el cuarto de la banda- suele considerarse uno donde el porcentaje de relleno aumenta notablemente. Qué extraño mito, ése. Porque, pese a que en general carece de la potencia de la que la banda se había mostrado capaz en el pasado, es su disco más parejo, más escuchable de principio a fin. Eso no quiere decir que es perfecto; lejos de nosotros el decirlo.
Pero los desniveles -con alguna pequeña y obviable excepción- jamás llegan a molestar realmente, a estropear la escucha, a irritar. Además, y aunque Morphine siempre resulta un poco claustrofóbico (a su pesar, creemos), aquí esa sensación se suaviza con elegancia, diluyéndose en las densas aguas azules de la portada.
Like swimming casi nunca alegra, no quiere alegrar, pero deprime menos y seduce más que otros discos de la banda (excepto el último, tan atípico en todo sentido, que sin embargo deprime por ser el último de la banda tras la muerte del cantante y compositor Mark Sandman).
Early to bed
7 comentarios:
El apunte es muy bueno y gracias a él y a mi imparable curiosidad descubrí esta disolución sedante en medio del océano. Es un rompimiento de los lazos que te atan a lo terrenal y te atraen y te liberan en la turbulencia marítima. La voz de Sandman es enigmática y pronuncia a su manera el punto de locura que engancha, igual opino que en este disco quitaría algo de voz, como también restaría algo de estridencia en algunos instrumentos. Temas de relleno los hay, pero no veo tantos. Sin duda en este disco para mí contrastan más porque lo encuentro más complejo que los otros y la simplicidad (de esos temas de relleno) se subraya más de lo debido. Los elementos y el juego de jazzístico mucho más palpables en Like Swimming complementan esta extraña y original mezcla subacuática dónde uno más que nadar, bucea. Uno escucha , y se escucha respirar. Los graves tan graves vibran de la completa estancia corporal. Consigues extraviarte, perderte.
Un buen acierto, y un buen riesgo escucharlo.
Coincido totalmente (excepto quizás con la parte sobre la estridencia de los instrumentos... pero eso es una cuestión de gustos, y no importa).
Sí, sin duda; un disco para bucear lentamente, para perderte, para arriesgar.
Dicho sea de paso, ¿alguna vez pensaste en escribir reseñas de discos?
No lo haces nada mal...
Saludos...
Es en el tema 4 donde encuentro esa estridencia. Un instrumento que no pega pero bueno, cuestión de gustos.
No, no lo había pensado. Pero lo estoy pensando...
Gracias
No hay de qué!
Piénsalo, sí.
Saludos...
like swimming es excelente de punta a punta.
si querés el tema hangin on a curtain está de mas, pero solo si querés.
morphine es la banda con menos temas no escuchables del planeta tierra, y me atrevo a decir que de otras realidades paralelar también.
chau
era paralelas, no paralelar.
gracias a dios que leo lo que comento.
chau
No conozco a todas las bandas del planeta Tierra ni menos aún de las realidades paralelas, así que no sé. Pero coincido en que Morphine se deja escuchar con agrado casi siempre. (Con la posible excepción, para mi gusto, de algún tema del disco Yes).
Saludos y gracias por la visita y el comentario.
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