Seremos breves: este disco justifica el pasaje de los Ramones por este valle de lágrimas.
Es -y no perdemos el tiempo en argumentaciones- uno de los más perfectos discos de la historia.
(No lo ignoramos: éste es un supuesto blog de crítica y nuestro deber sería informar a los lectores, discutir, analizar, evaluar... No. En este caso preferimos que escuchen el disco y PUNTO. Creemos que no hay nada que discutir).
(Aunque si alguien quiere hacerlo, bienvenido. Que empiece el debate imposible).
I wanna be sedated
3 comentarios:
Hi! Ho! Lets Go!
Pues eso, uno de los mejores discos de la historia. Totalmente de acuerdo.
Buenas reseñas de discos hay en tu Weblog.
¡Ánimos y adelante!
Gracias, dani.
Nos hemos quedado pensando que hay de todos modos un debate posible a partir de este disco: ¿Marky Ramone -que aquí debuta sustituyendo al baterista original Tommy Ramone- mejora o empeora a los Ramones?
Nosotros opinamos que los mejora pero únicamente en este disco, donde su toque más marcado y pesado funciona a la perfección. Claro, sólo que este disco es TODO PERFECTO y por ello es perfecto aquí Marky Ramone -quien contribuye al estilo un poco menos primitivo, apenas más refinado. Sin embargo, en vivo Tommy es muy superior y realmente distingue a los Ramones con un toque jazzy y segundón que influye sobre la guitarra de Johnny y hace que la música fluya con más naturalidad y, sobre todo, más cercana a la esencia del rock'n'roll de los años cincuenta/principios de los sesenta, fundamental como inspiración para la banda.
Votamos por Tommy, entonces, si bien aquí está bien que haya abandonado los parches (y mejor aún que haya ocupado el puesto de productor -y de guitarrista no mencionado en algunos temas -y de compositor (era un excelente compositor; la música de Blizkrieg bop le pertenece, por ejemplo)-.
El gran error de los Ramones fue dejar de lado las inteligentes y siempre adecuadas contribuciones de Tommy, el tipo que quizás tenía más clara la visión artística dentro de la banda.
Viva Ritchie Ramone!
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