En la mayoría de las reseñas de este blog, la historia personal del comentarista está muy lejos de la historia del disco comentado; es decir, no tengo recuerdo personal de las circunstancias que rodearon la publicación del disco, y por lo tanto mantengo una distancia quizá favorable a una valoración más fresca de la obra en cuestión, sin los prejuicios y los juicios que se le han ido adhiriendo como mejillones a una roca en el mar... He notado que demasiado a menudo se repite una idea sobre un disco sin que ésta se cuestione desde otra perspectiva. Bueno, algo por el estilo se pretende aquí; discutir desde una mentalidad abierta, abierta a la percepción y no condicionada por la historia, que a fin de cuentas el tiempo borrará... La música puede perdurar; las anécdotas sobre la musica, es deseable que se pierdan, a la larga. Quiero apurar un poco la labor del tiempo.
Bueno, la perorata viene al caso porque estoy ante un caso distinto; sí tengo memoria personal de este disco: yo estaba en Londres el día en que salió a la venta y probablemente fui uno de los primeros compradores (también de "End of the century" de los Ramones y de "Get happy!" de Elvis Costello).
El cambio era notorio. Desde la carátula hasta la tipografía hasta el estilo de los títulos de las canciones hasta, bueno, el simple hecho de que se tratara de un álbum doble. Parecía un trabajo apurado y barato, a decir verdad... Desconfié.
Y aquí salto hacia la historia "colectiva"... o al menos mediática (¿pueden diferenciarse hoy en día?)... Quien lea una reseña sobre "London Calling" encontrará, en un coqueto y poco imaginativo primer lugar, la referencia a que la revista Rolling Stone lo consideró el mejor disco de los años ochenta... pese a que se publicó a fines de 1979, bla, bla, bla... Me pregunto desde cuándo esa revista es una guía crítica válida; pero dejemos eso de lado. El punto a discutir es el prestigio que acompaña al disco: el de ser uno de los mejores de la historia del rock.
Con los años lo he amado. Hoy lo amo como a un viejo amigo empeñoso, sincero y confiable, que siempre ha estado ahí, con sus pasiones y su espíritu abierto... Pero la verdad es que, pese a la excelente producción de Guy Stevens (o de Bill Price, en esto hay anécdotas varias, pero no importa, lo que importa es la calidad notable de la producción, ésta sí quizá la mejor que he escuchado en un disco de rock -aunque he escuchado algunas que se le acercan, como la de Ed Stasium y Tom Erdelyi para "Road to ruin" de los Ramones y la -disculpen ustedes, pero así es la vida- la de Eddie Offord para "Fragile" de Yes), pese a la estupenda producción, clara, aireada, precisa y potente, y pese a un puñado de inmejorables canciones, no sé si "London Calling" merece la corona que han puesto sobre su humana cabeza.
Digan lo que digan, me parece que hay mejores melodías en el anterior y desdeñado "Give´em enough rope", aunque la producción fuera demasiado plana y ruidosa, aunque no existiera variedad... en fin. Fue mi impresión cuando escuché mi recién comprado "London Calling" en aquellos idos tiempos...
Sí, sí, yo entiendo: hay una sorprendente y eficaz variedad, cómo no. Muchos estilos diferentes, cómo no. Y una superación de antiguas limitaciones musicales (sobre todo en el bajista Paul Simonon, que aquí realmente se destaca). Es un disco grandioso (bah, dos discos en un mismo sobre), lleno de vida y deseo de lucha. Casi heroico, cómo no.
No le niego nada pero aún así, escuchémoslo sin el mote (casi apellido) de "el-mejor-disco-de-la historia-etc-etc-".
Es que se escucha mejor así. De veras.
¿Para qué necesitamos que sea el mejor? Ni siquiera es indiscutible como el mejor de la banda... (¿"Sandinista" quizás?)
Eso sí: es excelente, y podría haberse grabado en la mañana de hoy (excepto porque hoy en día no se hacen cosas tan buenas...).
Y por otra parte, no sé si existen los mejores discos de la historia. Al menos pensémoslo un poco antes de repetirlo como acólitos.
Volviendo a "London Calling", todavía no me decido. Es entusiasmante, fresco, intenso y disfrutable de principio a fin y contiene dos de mis canciones favoritas, "Brand New Cadillac" y "Train in vain". Así que...
Working for the clampdown
Bueno, la perorata viene al caso porque estoy ante un caso distinto; sí tengo memoria personal de este disco: yo estaba en Londres el día en que salió a la venta y probablemente fui uno de los primeros compradores (también de "End of the century" de los Ramones y de "Get happy!" de Elvis Costello).
El cambio era notorio. Desde la carátula hasta la tipografía hasta el estilo de los títulos de las canciones hasta, bueno, el simple hecho de que se tratara de un álbum doble. Parecía un trabajo apurado y barato, a decir verdad... Desconfié.
Y aquí salto hacia la historia "colectiva"... o al menos mediática (¿pueden diferenciarse hoy en día?)... Quien lea una reseña sobre "London Calling" encontrará, en un coqueto y poco imaginativo primer lugar, la referencia a que la revista Rolling Stone lo consideró el mejor disco de los años ochenta... pese a que se publicó a fines de 1979, bla, bla, bla... Me pregunto desde cuándo esa revista es una guía crítica válida; pero dejemos eso de lado. El punto a discutir es el prestigio que acompaña al disco: el de ser uno de los mejores de la historia del rock.
Con los años lo he amado. Hoy lo amo como a un viejo amigo empeñoso, sincero y confiable, que siempre ha estado ahí, con sus pasiones y su espíritu abierto... Pero la verdad es que, pese a la excelente producción de Guy Stevens (o de Bill Price, en esto hay anécdotas varias, pero no importa, lo que importa es la calidad notable de la producción, ésta sí quizá la mejor que he escuchado en un disco de rock -aunque he escuchado algunas que se le acercan, como la de Ed Stasium y Tom Erdelyi para "Road to ruin" de los Ramones y la -disculpen ustedes, pero así es la vida- la de Eddie Offord para "Fragile" de Yes), pese a la estupenda producción, clara, aireada, precisa y potente, y pese a un puñado de inmejorables canciones, no sé si "London Calling" merece la corona que han puesto sobre su humana cabeza.
Digan lo que digan, me parece que hay mejores melodías en el anterior y desdeñado "Give´em enough rope", aunque la producción fuera demasiado plana y ruidosa, aunque no existiera variedad... en fin. Fue mi impresión cuando escuché mi recién comprado "London Calling" en aquellos idos tiempos...
Sí, sí, yo entiendo: hay una sorprendente y eficaz variedad, cómo no. Muchos estilos diferentes, cómo no. Y una superación de antiguas limitaciones musicales (sobre todo en el bajista Paul Simonon, que aquí realmente se destaca). Es un disco grandioso (bah, dos discos en un mismo sobre), lleno de vida y deseo de lucha. Casi heroico, cómo no.
No le niego nada pero aún así, escuchémoslo sin el mote (casi apellido) de "el-mejor-disco-de-la historia-etc-etc-".
Es que se escucha mejor así. De veras.
¿Para qué necesitamos que sea el mejor? Ni siquiera es indiscutible como el mejor de la banda... (¿"Sandinista" quizás?)
Eso sí: es excelente, y podría haberse grabado en la mañana de hoy (excepto porque hoy en día no se hacen cosas tan buenas...).
Y por otra parte, no sé si existen los mejores discos de la historia. Al menos pensémoslo un poco antes de repetirlo como acólitos.
Volviendo a "London Calling", todavía no me decido. Es entusiasmante, fresco, intenso y disfrutable de principio a fin y contiene dos de mis canciones favoritas, "Brand New Cadillac" y "Train in vain". Así que...
Working for the clampdown
5 comentarios:
¿Y ustedes qué opinan?
hola amigo
enhorabuena por tu blog y tu críticas del mítico london calling. me encantaría poder publicar tu crítica en www.masmusika.net si quieres escribeme a webmaster@muchogusto.net
gracias por tu colaboración y enhorabuena por el buen trabajo.
saludos
Muy buena critica y muy buen blog!
El mio es de discos y peliculas y tambien opine de mi favorito el London Calling de los Clash.
Te dejo la direccion y te agrego como blog amigo!
Gracias
http://discosypelis.blogspot.com
"Eso sí: es excelente, y podría haberse grabado en la mañana de hoy (excepto porque hoy en día no se hacen cosas tan buenas...)."
Totalmente de acuerdo, es un disco que, lo escuches cuando lo escuches, siempre te parece cojonudo y actual. Ya quisieran los pintamonas de los grupos de ahora sacar algo la mitad de bueno...
Yo no tengo blog pero te dejo este enlace: http://linoleo.wordpress.com/
Creo que tenemos gustos bastante comunes. Un saludo!
Ojalá nos equivoquemos. Ojalá mañana aparezca una banda que nos haga callar la boca. Por el momento no la conozco.
Aunque me gustan los White Stripes.
Pasé por tu página. Interesante.
Mantenemos el contacto.
Saludos!
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